No hace falta romper la alcancía.
Creo que todos hemos escuchado en algún momento la historia aquella del niño que le pregunta a su papá ejecutivo, que cuánto gana él por hora. Si no la conocen; la historia continúa con el papá muy extrañado, comentándole a su hijo el monto que le pagan en su trabajo cada hora. Minutos después, se […]
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