Maullando por un sueño.


Se sabe querida.
Se sabe querida.

Hay, aproximadamente, unos 50 metros entre el portón exterior de la empresa y mi escritorio. Me toma, a lo sumo, unos segundos, el caminar desde la acera, hasta mi silla. Sin embargo; la noche en que hice el corto recorrido, cargando una caja de cartón con 2 gatitas casi recién nacidas adentro, fue tiempo suficiente para que, dos personas diferentes, me dijeran esto:

#1:  «¿Y esos gatos que, adónde hay que irlos a perder?¿Le ayudo?»

#2: » ¿Que, mae, adonde hay que tirarlos? Yo todavía me acuerdo, cuando era carajillo. ¡Cómo los tiraba yo! ¡Los hacía reventados contra la pared, viera cómo quedaban!»

Luego de mi par de putazos, que tomaron medio en serio y medio en broma, ahí quedaron ambos; recordando, riendo y compartiendo anécdotas; el cachiflín amarrado a la cola, los lanzamientos metidos en bolsa a los ríos… Curiosamente, en Costa Rica, nunca me ha sido difícil encontrar gente que diga, que los gatos les dan asco, les disgustan o simplemente, les generan odio. Esto, parece otorgar permiso para dejar de ser humanos (o lo que se supone que debe ser un humano), y comenzar a repartir dolor, sobre todo a seres que no pueden devolverse y partirle las espinillas a sus agresores con un tubo de cañería, por decir algo.

Tiene que haber algo fundamentalmente defectuoso, en quienes equiparan a un perro de la calle, con un tiro al blanco. Algo se tuvo que haber muerto por dentro de alguien, para que los gritos de dolor de un animal que no hizo nada malo, no le hagan desistir de la estupidez que está cometiendo.

IMG_1588Medio año después, el par de gatas de la caja de cartón de aquella noche, no duermen escondidas y temerosas entre latas abandonadas; no están infestadas de garrapatas, con frío, sarna o alguna herida que, de forma lenta y segura, deja que se les escape la vida, mientras intentan seguir cazando, cada día, lo que haya. Hoy, me muero de la risa al verlas perseguirse en mi apartamento. Si, como cada dueño orgulloso que anda por ahí, yo también juro que mis gatas «son como humanos», «que sólo les hace falta hablar» y ese poco de cosas que , de fijo, le han oído decir a alguien más.

Les cuento, que la experiencia es sorprendente.

Hay organizaciones llenas de gente que sabe lo que esto se siente; el darle una oportunidad de un futuro mejor a un animal que pudo haber terminado muerto en la calle. Lo sé, por que durante años he tenido el honor de hacerles reportajes a algunas o de donarle mi trabajo a otras. En esta ocasión, quiero exhortarlos a acercarse a «Telemaratón Canina».

Durante años, he visto desde los mejores asientos de primera fila, cómo ellos usan la pasión por rescatar animales, como su principal combustible.

Telemaraton Canina
Telemaraton Canina

Si quieren aprender cómo multiplicar recursos, tocar puertas, no aceptar un no por respuesta, levantar castillos en el aire con bases firmes como piedra, donen su tiempo y capacidades a esta ONG.

Se necesitan voluntarios, gente que pueda transformar su hogar en una «casa cuna», mientras aparece alguien dispuesto a adoptar a ese animalito que alguien «rescató de la calle…pero no puede dejarse», profesionales que apoyen desde su área de acción, gente creativa y apasionada por transformar lo que pudo ser una triste historia, en un final feliz.

Si, como yo, están hartos de gente y organizaciones que, para ayudar, tienen que esperarse a que, algún formalismo o burocracia, termine de petrificarse, tengan la seguridad, de que aquí encontrarán seres que se ganan el calificativo de HUMANOS, listos a moverse, a actuar y a dejar las cosas en mejor estado del que las encontraron.

Búsquenlos en su página de Facebook: Telemaraton Canina. Detrás de cada animal abandonado, hay una historia que podría llenar un libro. Atrévanse a escribir el capítulo final, o al menos, a proveer la inspiración para que alguien más lo haga.

– Walter Campos

No merecemos la calle...
No merecemos la calle…

19 comentarios sobre “Maullando por un sueño.

  1. Alentador Walter. Eso demuestra el ser humano que sos, al darle abrigo y techo a estos animalitos, yo por mi parte, sería Ladrando por un sueño, mi perro: Chester, va a cumplir un año de vivir con nosotros, a él lo dejaron abandonado en un parque, eran dos, al momento de que un enlace hizo público su hallazgo y, tras un afán enorme de querer una mascota, le dije que lo trajera. Hasta el momento es algo maravilloso, ellos sólo esperan cariño (sino lloran todo el día), comida y un abrigo donde sobrepasar la noche. Tal vez me gane un enemigo a las veterinarias, pero hasta el momento es mejor darle cabida a un animal abandonado que comprarlos por sumas exorbitantes. Es por eso que me identifiqué con su historia, y al que tenga la intención: ¡a ayudar! Ya que ellos comparten el mundo con nosotros, nos guste o no.

  2. Con esta anécdota de los felinos te aprecio más como comunicador pero todavía más como ser humano. Precisamente en estos momentos tengo a «Perla», una gatita que vinieron a botar a mi condominio. Las cosas son de tal forma que yo no fui quien la adoptó, fue ella quien lo hizo conmigo. De esto hace más de tres años y no me arrepiento para nada. ! Como siempre, un gusto el leer tus entregas…

  3. Fígaro mi gato trípode (sólo tiene 3 patas, gracias a un hijo de dios que le tiró un ladrillo cuando era un bebé) es hoy un gato feliz, un sobreviviente, camina como conejo, pero tiene la actitud de león, él no sabe que le falta una pata, o no lo demuestra, es un campeón. ahora está echado en mis piernas mientras yo lucho para escribir en la laptop. Quiero estar siempre para él, como él está siempre para mí.

  4. Es inconcebible cómo hay «gente» que pueda disfrutar o a quienes les parezca gracioso lastimar a un animalito…da la sensación de que ojalá alguien les haga lo mismo a ellos…. Y por el contrario hay quienes se entregan de cuerpo y alma a cuidarlos…y ojalá éstos sean cada vez más. Qué lindo artículo cuyas protagonistas son tus gatitas…que por cierto son bellas e irradian una gran personalidad. Como siempre, gracias por escribir…

  5. Hola Walter, de todos los posts que haz escrito este es el que más me ha tocado el corazón…
    Yo también amé a un gatito (que tristemente murió hace dos meses) y aún lo lloro porque la conexión y experiencia que es… Es indescriptible. Como vos he sentido esa impotencia cuando la gente habla de los pobres animalitos como si no merecieran vivir, es repudiable.
    Gracias por hacer esto y llamar la atención de la gente…

    1. Saludos! Más bien, muchísimas gracias por leer. Que lástima enterarme de la muerte de su gato. Pero tal vez, sea hora de brindarle a otro misingo, la oportunidad de tener un hogar, tal y como el otro la tuvo 🙂
      Un abrazo
      Walter

      1. gracias! si de hecho, me estoy terapeando todavía porque muy en el fondo uno se siente mal, como si lo estuviera reemplazando 😦 pero bueno, sé que abrir el corazón a otro animalito es lo mejor y sé que terminaré por hacerlo….

        Deberías escribir más de tus gatitas! como se llaman las gorditas?

  6. Me sacó las lágrimas… porque desgraciadamente es tan cierto, que hay «personas» capaces de maltratar a un indefenso animalito, qué está dispuesto a brindarte su amor de forma incondicional… esas «personas», son capaces igual de maltratar a un niño o a un anciano…

    Brindar nuestra ayuda a los seres indefensos nos será retribuido, no de forma monetaria, si no con un calorcito en el corazón… un calorcito especial… que te hace sentir un mejor ser humano…

    Hay muchas formas de ayudar… brindando tiempo o dinero, o ambos si nos es posible… brindando un hogar temporal o permanente… adoptar es una magnífica posibilidad… si quieren adoptar en el Face una posibilidad es Gatitos al Rescate… o quizá quieran ayudar de otra forma…

    A Walter… gracias como siempre…

  7. Muy linda historia!! Es triste saber que hay personas que hacen sufrir a un animal, siendo sincera a mi antes no me gustaban los gatos, no les hacia daño pero igual no me gustaban, hace un año adopte una minina que fue rescatada estaba muy golpeada , ahora no me arrepiento de eso, es increíble lo que un gatito puede causar , son sinceros , chineados , fieles y mil cosas más soy de las que piensan » que son como humanos» , bueno y sin temor a equivocarme en muchas ocasiones mejor compañía que una persona..

    Definitivamente es una experiencia increíble adoptar a un felino , Bueno yo tengo la dicha de tener una felina «Luna» y mi canina Bony, no las cambio por nada, ojala más personas se atrevan a adoptar a un animalito que lo necesite , estoy segura no se arrepentirán , estos de anilalitos peludos de 4 patas son una maravilla, !!

    Muy lindo el Post, Saludos!! 😀

  8. Q dicha q apesar de todo exista un grupo de personas como ustedes con una mente y más q todo un corazón abierto a darle amor a todos esos animalitos q muchas veces vemos en la calle y nos da lástima,pero no hacemos nada para cambiar su situación.
    Aplaudo a todos aquellos q son medio para llevar a otros esas historias algunas muy triste de dura realidad ,pero q a su vez sirven de inspiración para sacar el verdadero ser humano q llevamos dentro.

  9. es increíble que existan personas que piensen de esa forma de los animales, está bien que ellos no habla pero para mi también son seres vivos que no merecen morir, o vivir en la calle, personalmente yo tengo 3 gatos, los 3 adoptados, por que yo no tengo corazón para verlos tirados en la calle, adoptaría mas, pero por cuestiones de espacio se me hace imposible, sin embargo aliento a todas las personas a que lo hagan… ustedes no saben cuanto lo van a agradecer estos animales….

  10. Esta lectura me recuerda un perro q mi familia recogió de la calle hace muchos años, estaba herido y bien flaco de hambre. Le dimos mucho amor hasta que se recuperó, pero el nos dió mas a nosotros… ahora quisiera creer que » todos los perros van al cielo»
    Gracias por dejarnos leerte, muy muy lindo ❤

  11. Hoy leí esta historia, y de verdad estoy muy conmovida y agradecida de hayan personas como usted. Soy rescatista y super amante de los gatos y se lo dificil de soportar comentarios indignantes sobre los gatos, sobre todo de algunos compañeros de trabajo ( con esas ganas de mandarlos a pasear al lago de la sabana). La verdad el que no quiere a un gato es, porque nunca ha tenido uno. En fin…..me alegra mucho que te gusten los gatos y agradezco tu labor contra el maltrato animal……un beso y un abrazo de parte mia y de mi bella Camila

Replica a edo Cancelar la respuesta