Usted estaba mejor ayer.


Fotografía de Jason Powell. (http://fotozup.com/looking-into-the-past-project/ )

Un par de hombres casados y  al borde de los 40, que atraviesan cierta crisis de edad y un escritor nostálgico a punto de casarse, que también atraviesa su propia fase extraña de vida, me dieron mucho en qué pensar hace poco. Se trata de dos películas de muy diferente calidad y tema, pero que me dejaron pensando en esto que ahora tienen en su pantalla.

Película #1 y tal vez, la más extraña para sacarle alguna enseñanza: HallPass. La trama: un par de tipos son constantemente sorprendidos por sus esposas, escaneando traseros ajenos, torciéndose el cuello cada vez que alguna universitaria levita con sus curvas enfrente y en fin, hechos un coctel de hormonas tal, que pareciera copiado de la fórmula adolescente que dicta que hasta el movimiento del bus levanta las ganas. Hartas ya de tanta cosa, consultan a una amiga mayor, que  de paso es psicóloga; ella les dice que lo que necesitan hacer, es darles a sus maridos una semana libre del matrimonio. Ante el escándalo de las esposas, la psicóloga explica lo que sucede: De acuerdo con ella, los hombres van lentamente idealizando su época de solteros, hasta el punto, en que se imaginan que eran unos verdaderos semantales que arrasaban con cuanta forma de vida femenina se les pusiera al frente. Ya con esa ilusión encima, llegan a pensar que la única razón por la que no están ahogándose en aventuras sexuales, es por que están casados.

La psicóloga continúa explicando que, con una semana libre del matrimonio, los maridos de las protagonistsa van a chocar de frente con la realidad: no son los playboys que sus mentes han construido, las mujeres no se van a derretir a su paso como si fuera un anuncio de cierto desodorante masculino y , en general, al término de esa semana, van a volver con sus esposas, agradecidos de tener a alguien ( y con el orgullo lastimado entre las patas).

La segunda película es «Media Noche en París». En ella, un guionista de Hollywood está en la Ciudad Luz con su prometida y sus suegros. Para él, es  como un Disneylandia para adultos, maravillándose ante cada callejuela y cada café que se encuentran; extasiado por estar en esta ciudad, que sirvió de casa para Hemingway, Fitzgerald, Stein, Dalí, Picasso y el resto de sus héroes literarios y artísticos. Para su futura esposa y su familia, París es una incomodidad tras otra, además de que detestan todo lo que pueda provocar que el escritor se dedique a lo que realmente quiere: terminar su libro, en lugar de seguir haciendo dinero con los guiones que fabrica para la industria del cine.

Una noche, harto del esnobismo de su prometida, el escritor se va a caminar por las calles del Paris que ama. Exactamente a media noche, un carro de los años 20, lleno de extraños enfiestados, se detiene ante él y lo invitan a subir. Él accede y el viaje lo lleva al París de los años 20, a una fiesta en donde conoce a Hemingway, al resto de sus héroes y por si fuera poco, se enamora.

Entonces, tengo dos películas, una es como un American Pie para adultos, la otra es una carta de amor a París y la literatura. Pero ambas tocan el mismo tema: la creencia en aquél dicho que dice que «todo tiempo pasado fue mejor».

Todo tiempo pasado PARECE, ser mejor. No digo que el pasado no tenga su magia, pero estoy decidido a que esos buenos recuerdos no sean como grilletes que me permitan correr, o volar. Estamos plagados de añoranzas por nuestra inocencia infantil, por la emoción de estar descubriendo el mundo al llegar la adolescencia y está bien, el pasado nos ayuda a ser lo que somos, pero no se puede vivir en él, equivaldría a un retiro prematuro de la aventura, de las ganas de seguir adelante, de querer devorarse el mundo.

Varios de mis recuerdos de colegio, incluyen a profesores que nos hablaban de la vida y nos decían: «si yo supiera lo que sé hoy, con la edad que tienen ustedes… bueh!» y dejaban la frase en el  aire, como indicando que serían una verdadera máquina de doblegar el destino y conquistar cualquier obstáculo. Aprecié la buena intención, pero siempre me cayeron mal esos comentarios. Los percibí como algo derrotista, como si esos adultos que me hablaban estuviesen, sin ser ancianos ni mucho menos, sintiendo que «ya habían jugado». Casi como el par de maridos de la película; les sentía la noción esa de que, en su fase adolescente, eran invencibles y la única razón por la que no «tienen la vida que se merecen», era por que ya la adolescencia se les había escapado de los dedos.

Es cierto que, en el pasado de las personas, pueden quedar algunas cosas que son percibidas como ventajas: falta de responsabilidades, juventud, capacidad de asombro, belleza o condición física… la lista puede seguir. Pero si el hecho de que esas cosas queden en otros calendarios es un obstáculo: ¿Cómo me explican a tanta gente que se vuelve atleta luego de un accidente que les deja sin alguna extremidad?¿Con qué cara podría contradecir alguien al ciudadano mayor que, a sus 70, 80 o 90, tomó esa decisión que revolucionó su vida? ¿Al artista honesto, que sigue con hambre de explorar más, y hace mucho mejor su trabajo entre más envejece?

Cada persona es un mundo, imagino que habrá circunstancias que, de verdad, imposibilitan al individuo para poder seguir creciendo, pero sí estoy convencido que tienen que ser de FUERZA MAYOR, así, con mayúscula. Mientras tanto, mientras uno pueda respirar, pensar y ser dueño de su espíritu, siento que es obligación de los no-mediocres, el seguir adelante.

¿En qué pararon las películas? Si no las van a ver les cuento, si no, eviten este párrafo por aquello de los spoilers, pero van un par de enseñanzas. En la de Woddy Allen, el escritor se enamora de una joven musa en los años 20. Así como él, ella añoraba el París de otro pasado, la belle epoque de inicios de siglo 20. Llega la posibilidad y ambos viajan a ese otro París en donde, como él lo hiciera antes, ella se maravilla de estar en la época que tanto admira. Pero conversando con grandes pintores de esa realidad, ambos se dan cuenta de que para ellos, la mejor época era una aún más lejana: El Renacimiento. Allí, el escritor tiene una revelación: lo que para unos es una época maravillosa, para otros es su realidad cotidiana y mundana. El presente es lo único que tenemos. Al volver a su época, encausa su realidad y se dirige en pos de sus sueños. Hall Pass por su parte, termina como todas las comedias de ese tipo, de forma predecible, pero aún así, con los maridos dándose cuenta de que la felicidad no está en su ilusorio pasado glorioso, como conquistadores.

Al final, pienso en un Yo del futuro que esté, erróneamente, soñando despierto con que ésta época fue mejor que la suya. Intentaría recordarle las muchas cosas que me desagradan del hoy, mi hambre por cambiar tanto y por trascender mis propias limitaciones. Le agradecería también, dándole la razón por las muchas cosas buenas de las que disfruto hoy. Terminaría, creo,  balanceando mis opiniones y llegando a la conclusión de que, si bien el pasado tiene una magia deliciosa, el presente es el lugar para fabricar ese futuro que uno desea; el mismo que, quizás, al llegar a él, nos reciba con la noticia de que ahí tampoco estaba la felicidad, pues ésta no es un lugar o tiempo, es una forma de vida.

-Walter Campos

(curiosamente, ambas con  Owen Wilson, quien demuestra que puede actuar, bajo la dirección de Woody Allen)

26 comentarios sobre “Usted estaba mejor ayer.

  1. Muy cierto… Creo que muchas veces las personas se aferran al pasado tanto para criticar (y de paso no disfrutar) su presente como para temer al futuro. El pasado tiene ese matiz de «haber sido mejor» quizá por el simple hecho de que ya sabemos cómo fue, qué pasó, que dijimos y que no dijimos, es decir, en él tenemos cierto grado de certeza que el futuro no puede ofrecer y que en el presente no todos logran ver. Esto me hizo recordar aquella frase de abuelitas: «ningún muerto fue malo», es similar no? Comparto la visión de que uno debe luchar y construir lo que vendrá ahora, hoy, en este momento. En lo personal eso de «voy a esperar que me salga una oportunidad» definitivamente no va conmigo, mientras uno espera esa oportunidad habemos mil luchando detrás de ella.

  2. Muy bueno y muy cierto.. Yo pienso q debemos trabajar por que el presente sea bueno, al final es en este tiempo en el q vivimos.. Pues es el pasado ya fue y el futuro no sabemos como será.. Para muchas personas su historia pasada no es nada buena han sufrido mucho y es hasta la actualidad q estan empezando a forjarse su vida.. El pasado solo puede enseñarnos a no cometer los mismos errores de los q talvez no estamos orgullosos.. Asi q vivir pensando en lo q fue es un desperdicio de tiempo energías y vida.. Mejor invertir todo eso en lograr nuestras metas y ser feliz hoy.!
    Saludos.. 😉

  3. Exc post! mis palabras quedan re cortas. Igual muchas veces pensamos que seria mejor cambiar cosas de nuestro pasado, pero despues de todo eso que vivimos bueno o malo nos hace ser como somos hoy… una vez lei una frase de Cantiflas «No se porque la gente se preocupa tanto? El ayer ya paso, el presente no ha pasado y el futuro no ha llegado» 🙂 saludos!

  4. Es tan fácil querer volver a ese pasado q recuerda momentos inolvidables y épocas bellas d nuestra vida… Pero para eso es el pasado para recordar las buenas cosas q hacemos en el presente por eso siempre hay q tratar d hacer y disfrutar lo mejor!!!!

  5. Creo que todos experimentamos ese sentimiento de estar mirando hacia atrás, no tengo mucho que aportar, excelente post!!! Buenas noches.

  6. Una gran enseñanza, gracias y totalmente cierto que la felicidad y el éxito se van fabricando día con día, lo que marca la pauta en la vida no es una etapa determinada, sino las pequeñas decisiones que se van tomando y dan forma a ese camino que llamamos vida.

  7. Definitivamente, una idea común en el ser Humano, la de creer que la felicidad pudo haberse alcanzado si hubiera actuado o tenido otras posibilidades en el pasado, o que se lograra en el futuro… Para mi simplemente esta en tratar de ser mejor cada día y valorar cada esfuerzo que se hace y seguir luchando por ser mejores en lo que se hace.. porque si se vive soñando en esa felicidad, a lo mejor nos pasara eso que dices en el post que llegamos al futuro y nos recibe con la noticia de que no se encuentra tampoco la felicidad..
    Creo que lo mejor es valorar cada una de las cosas buenas y porque no las malas y que estas nos ayuden hacer mejores, no dejando de luchar..!! porque puede que nos suceda que por luchar por alcanzar felicidad, no valoremos los buenos momentos que no da la vida,.!!! En fin me encanto el Post, Saludos.. 😀

  8. (Y) me reegusta,,,, «Mientras tanto, mientras uno pueda respirar, pensar y ser dueño de su espíritu, siento que es obligación de los no-mediocres, el seguir adelante.» esta frase,,,, mucho de verdad es necesario Disfrutar la Vida al máximo, sino nunca se podrá alcanzar la felicidad,,,, 😀 wal wal,,, otra vez,,, lo hiciste,,, bless :*

  9. Sabes? pasando por acá, este post me cayo justo cuando lo necesitaba… sinceramente soy nueva por acá, pero no pude evitar agradecerle, porque de verdad que sus palabras me hicieron entrar en razón…
    Gracias Walter.

  10. Esto me recuerda al inicio de uno de los más grandes libros escritos: «Wh ether I shall turn out to be the hero of my own life, or wh ether that station will be held by anybody else, these pages must show.» Dickens. Sí nos quedamos esperando que llegue un agente externo para darnos mejores recuerdos que nuestros años mosos pues no aprendimos nada de esos tiempos. Los días son para vivirlos así como los disfrutamos ayer, queriendo ser mejores que hoy; por eso todos siempre buscamos subir laboralmente, aumentar ingresos, cambiar de auto, etc. El m ediocre se quedará aludiendo su pasado hasta tomar la depresión como salida o su orgullo como barrera. Slds.

Responder a Lucy Centeno Acuña Cancelar la respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s